Este vídeo muestra la prueba de hace unos días del denominado sistema de diluvio (deluge system) de la famosa plataforma 39B del Centro Espacial Kennedy. Esta instalación se utiliza para absorber y reducir todo lo posible el calor extremo que genera el lanzamiento de un cohete, además del ruido y la onda de choque (onda súbita de presión); también incluye una estructura deflectora para las llamaradas.
El agua es un buen método para aliviar todo ese calor, ruido y la presión de esa onda de choque, pero hacen falta cantidades ingentes en el momento exacto. La NASA ha ido optimizando ese flujo para que funcione de forma óptima y aquí lo prueban antes de los lanzamientos. En total estamos hablando de que se liberan unos 1,7 millones de litros de agua en el momento exacto.
En otros complejos espaciales se emplea un sistema similar, por ejemplo ya lo vimos en el Kourou de la Guayana Francesa.
En este otro vídeo de la NASA se puede ver un time-lapse la instalación del nuevo deflector principal que básicamente aleja las llamaradas de los cohetes en el instante del lanzamiento. Mide unos 20 metros de ancho y 25 de largo, con una inclinación precisa de 58° que está calculada para desviar de forma óptima la intensa salida de gases y calor hacia la zona norte durante el lanzamiento.