Unos cuatro minutos y medio han bastado a la sonda InSight de la NASA para desplegar sus dos paneles solares y así pasar una importantísima prueba antes de su lanzamiento a Marte.
InSight, de Interior Exploration using Seismic Investigations, Geodesy and Heat Transport, en español, Exploración Interior utilizando Investigaciones Sísmicas, Geodesia y Transmisión de Calor, es un aterrizador que tiene como objetivo primario determinar por primera vez si hay actividad sísmica en Marte, la cantidad de calor que emana de su interior, y estimar el tamaño de su núcleo y si este es líquido o sólido. El objetivo secundario de la misión es estudiar la geofísica, la actividad tectónica, y el impacto de meteoritos en Marte.
Para ello lleva a bordo varios instrumentos, entre ellos un sensibilísimo sismógrafo conocido como SEIS, de Seismic Experiment for Interior Structure, o Experimento Sísmico para Estructura Interior, en el que se detectó un fallo a finales de 2015 que obligó a posponer el lanzamiento, originalmente planeado para el 4 de marzo de 2016.
La esfera problemática del SEIS es la del centro de la imagen – CNES
Pero una vez solucionados los problemas con SEIS la NASA tiene previsto lanzar hacia Marte el 5 de mayo de 2018 para que tome tierra en Elysium Planitia.
Aparte de probar los paneles solares los técnicos de Lockheed Martin Space aprovecharon para colocar en la sonda un segundo microchip en el que van almacenados más de 1.6 millones de nombres de personas de todo el mundo que se apuntaron para que su nombre viajara a Marte… aunque este es el segundo chip con nombres que se instala en la InSight, ya que ya había otro con cerca de 827.000 nombres de los que nos apuntamos en la primera tanda.
Tarjeta de embarque para el InSight
La misión está en Twitter como @NASAInSight.