Tras las pruebas realizadas con el Atmospheric Reentry Demonstrator y mas recientemente con el Intermediate Experimental Vehicle la Agencia Espacial Europea ha contratado con Thales Alenia el desarrollo de las especificaciones del Space Rider, el futuro avión espacial Europeo.
El Space Rider será una nave espacial que despegue verticalmente en un cohete –un Vega C– y que aterrice como un avión. El despegue será del espaciopuerto de Kourou y el aterrizaje en la isla de Santa María en las Azores.
La idea es que Europa disponga de un sistema de transporte espacial asequible, independiente y reutilizable que permita el acceso rutinario y el retorno desde órbita baja terrestre. Transportará cargas útiles para una amplia gama de aplicaciones, altitudes e inclinaciones de órbita. Podrá permanecer en órbita hasta dos meses.
Algunas de las aplicaciones para las que podrá ser usado son experimentos en microgravedad aprovechando que estará en caída libre mientras esté en órbita; demostración y validación de tecnología en órbita para robótica, observación de la Tierra, o telecomunicaciones; vigilancia de desastres en la Tierra; o, incluso, la inspección de satélites ya en órbita.
Las cargas útiles que vayan a bordo pueden ser independientes o bien aprovecharse de los servicios de energía, control y transmisión y recepción que ofrezca la propia plataforma del Space Rider.
Su tamaño, en principio, va a ser menor que el del Boeing X-37B estadounidense, aunque aún no está terminado de definir. De hecho una de las cosas que se le ha pedido a Thales Alenia para el diseño inicial es que vean la posibilidad de ampliar la bodega de carga respecto a las propuestas iniciales.
El primer lanzamiento se espera para 2020.