Despegue del primer Starship – SpaceX
Según cuenta Payload, SpaceX ha entregado a la Administración Federal de Aviación de los Estados Unidos (FAA) su informe sobre el fallo del primer lanzamiento del Starship. Es un paso sin el que la empresa no puede conseguir recuperar su permiso para el lanzamiento del cohete, suspendido tras el primer lanzamiento.
Según la FAA «cuando se apruebe un informe final sobre el percance, se determinarán las medidas correctoras que SpaceX debe adoptar. Posteriormente, SpaceX deberá modificar su licencia para incorporar dichas medidas antes de recibir autorización para volver a lanzar.» Las negritas son mías.
Así que aunque SpaceX haya dado este paso por ahora es imposible saber cuándo se producirá ese segundo lanzamiento de prueba, por mucho que haya aparecido un aviso a navegantes que habla de un lanzamiento el 31 de agosto en la zona de Starbase.
Hay que tener en cuenta que, como ha dicho la agencia, la FAA tendrá que estudiar el informe que ha presentado SpaceX, que probablemente contiene datos de la prueba estática del Booster 9 con el sistema de supresión de calor y sonido por agua del pasado día 7 y las pruebas del sistema de autodestrucción modificado en el que la empresa está trabajando. Y después decidir qué medidas correctoras va a exigir a SpaceX, que a su vez necesitará algún tiempo para implantarlas.
También hay que tener en cuenta que hay una demanda contra la FAA y SpaceX por parte de unos grupos indígenas y medioambientales que piden la elaboración de un informe completo de impacto medioambiental antes de que el Starship pueda volar de nuevo.
Y no hay que olvidar que no está claro que estén listos tampoco que el Booster B9 y la Starship S25 que formarán el Starship del segundo lanzamiento de prueba. Al B9 aún tienen que instalarle, por ejemplo, el anillo que permitirá el escape de los gases durante la separación en caliente de la S25. Y también queda por ver qué pasó con los cuatro motores Raptor que se apagaron antes que el resto durante el más reciente encendido estático, que además duró como la mitad de lo que estaba programado.
Así que, como vengo diciendo desde abril cuando SpaceX lanzó el primero, sigo dudando mucho que el Starship vuele de nuevo este año.
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