Con un par de minutos de retraso sobre el horario previsto Blue Origin llevaba a cabo el decimoprimer lanzamiento de un cohete reutilizable New Shepard a las 15:32, hora peninsular española, del 2 de mayo de 2019. La misión se desarrolló a la perfección y a los 7 minutos y 30 segundos el cohete aterrizaba en la plataforma, seguido por la cápsula RSS H. G. Wells, que a los 10 minutos y 11 segundos tomaba tierra en el desierto de Texas.
A bordo de la cápsula iban 38 cargas útiles para diversas instituciones educativas, agencias gubernamentales y empresas privadas.
La altitud máxima alcanzada fue de 106 kilómetros, lo que supera claramente la línea de Kármán, situada en los 100 kilómetros y que convencionalmente se consideraba el límite del espacio. Fue la quinta vez que este cohete en concreto y esta cápsula iban y volvían del espacio. Son el tercer New Shepard construido y la segunda cápsula.
Quinto aterrizaje del tercer New Shepard y de la RSS H. G. Wells
Según dijo Ariane Cornell durante la retrransmisión el cuarto New Shepard y la tercera cápsula, a la que han bautizado como RSS First Step –nave espacial reutilizable Primer Paso– serán los primeros en llevar personas al espacio. Dice que antes de fin de año. A través de sus seis enormes ventanas otras tantas personas podrán ver la Tierra desde el espacio mientras disfrutan de unos momentos de caída libre –lo que siendo menos técnicos llamaríamos ingravidez–.
La RSS H. G. Wells, por su parte, seguirá siendo utilizada para llevar al espacio cargas útiles de clientes.
Blue Origin está en una dura pugna con Virgin Galactic por llevar al espacio los primeros turistas espaciales. VG lleva quizás una cierta ventaja porque su VSS Unity ya ha volado al espacio un par de veces, la segunda de ellas con tres personas a bordo. Pero Virgin Galactic está utilizando ahora la definición de astronauta que se aplica en los Estados Unidos que pone el límite en los 80 kilómetros; Blue Origin, por su parte, sigue persiguiendo superar los 100 kilómetros, que es la altitud requerida, al menos por ahora, por la Federación Aeronáutica Internacional.