Ayer Apple puso a la venta la versión 3 de Aperture (199 euros, 99 euros la actualización desde Aperture 2), su programa de procesado de fotografías. Compite directamente con Photoshop / Lightroom 2 (aunque sólo entre usuarios de Mac ya que no hay versión para Windows) y también de Capture One (Mac, Windows) que son algunos de los programas más populares entre fotógrafos profesionales y aficionados con pretensiones.
Si tienes algún interés en Aperture 3, lo mejor que puedes hacer es descargar la versión gratuita, funcional durante 30 días, y probarla por ti mismo. Ninguna opinión puede sustituir probarlo en primera persona.
No obstante, comento por aquí mis impresiones y algunos resultados de pruebas no científicas por si resultan de utilidad a alguien, aunque sólo sea sobre si merece la pena o no descargar e instalar el programa, que tiene un tamaño respetable. Otra opción es echar un vistazo a los numerosos videotutoriales disponibles (en inglés).
De hecho precisamente lo primero que se percibe de Aperture 3 -nada más iniciar la descarga del programa- es que el paquete que lo contiene es pesado. Muy pesado: ocupa 720 MB de espacio en disco. Esto es más del doble que Aperture 2 (300 MB) y casi diez veces más que Lightroom 2.6 (80 MB, algo más la beta de Lightroom 3).
Dos cosas a tener en cuenta: tanto el programa como la documentación sólo están disponibles en inglés. Y si ya utilizas una versión de Aperture deberás mover o renombrar el nombre de este paquete para no pisarlo.
Al abrir el programa la cosa pinta bien. Por fin el interfaz utiliza un tamaño de letra legible, que era una de las quejas respecto a Aperture 2. Sin embargo aparecen iconos de Facebook, MobileMe y cosas así en la barra de herramientas, lo que resulta como poco molesto por el aspecto de feria y por ocupar un espacio precioso. Afortunadamente se quitan en un periquete editando la barra de herramientas.
Lo anterior delata lo que es Aperture: el hermano mayor de iPhoto. Sin embargo esto no debe llevar a engaño: Aperture es muy potente (iPhoto lo es en su terreno) y sobre todo -y al fin y al cabo lo más importante- ofrece un completo conjunto de herramientas para el procesado de fotografías que además funcionan de maravilla, resultando en imágenes de excelente calidad en cuanto a nitidez, rango dinámico y colores.
Organización de fotografías
En este sentido pocos cambios y sí algunas mejoras, como la importación de vídeo aún tomado con cámaras réflex.
En Aperture siguen existiendo diversas formas de organizar las imágenes, incluyendo proyectos, carpetas, álbumes y álbumes inteligentes que guardan cierta jerarquía y que inicialmente puede resultar confuso sobre qué guardar en cada cosa.
Afortunadamente son flexibles y de uso opcional, de modo que cada uno puede organizarlo como prefiera, por ejemplo álbumes por temas (macro, paisajes, vídeos,...) dentro de un mismo proyecto que corresponda a una fecha o un viaje; o un álbum inteligente que automáticamente agrupe las marcadas como favoritas o etiquetadas con determinadas palabras clave.
En este sentido la forma en que organiza Aperture las fotografías es más parecido a como lo hace Lightroom y mucho mejor de como lo hace Capture One. También, como en Lightroom, es posible tener varios catálogos o bibliotecas de imágenes e imágenes en distintos discos físicos.
Procesado de imágenes
Probando con archivos raw de una Canon EOS 7D me da la sensación de que en global la imagen resultante con Aperture 3 es más viva y nítida que con Lightroom -la misma percepción que tuve al probar Capture One-, tiene menos ruido y prácticamente es suficiente con aplicar el preajuste automático (Auto Enhance) en casi todas las situaciones para obtener una versión válida y lista para exportar.
Este preajuste, o cualquier otro, puede aplicarse automáticamente en el momento de importar fotografías.
Un par de ejemplos de los resultados que he obtenido con la misma imagen aplicando un ajuste de exposición automática primero y el preajuste (preset) que mejor resultado obtiene después (siempre sobre una versión del raw sin procesar).
Archivo raw sin procesar
Original sin procesar
Ajuste automático
Ajuste automático de la exposición en Lightroom 2.6
Ajuste automático de la exposición en Aperture 3
Uso de preajustes (presets)
Preajuste "Direct Positive" en Lightroom 2.6
Preajuste "Auto Enhanced" en Aperture 3
Da la sensación de que Aperture 3 respeta más la sobreexposición sin corregirla tanto como hace Lightroom.
Un ejemplo de ruido (recorte al 100%) para una imagen a la que en ambos programas sólo se le ha aplicado el ajuste automático.
Lightroom 2.6
Aperture 3
Aperture parece entenderse muy bien con raw de la EOS 7D (hablando del caso que conozco, imagino que con otros modelos también lo hará) y lee e interpreta los datos relativos a los puntos de enfoque: cuál se utilizó y dónde se realizó dentro de la imagen, del mismo modo que el programa DPP de Canon. Sin embargo no parece leer el campo de metadatos que, configurado desde la cámara, incluye el nombre del autor de la foto.
Indicador del punto de enfoque utilizado
Según Apple, Aperture 3 añade más 200 nuevas funciones, algunas más visibles (como los mapas para geoposicionar fotografías y la detección de caras para identificar personas, herencia de iPhoto) y otras menos evidentes, no visibles (como arquitectura de 64 bits) o que vienen desactivadas por defecto, como la herramienta curvas.
Herramienta curvas
La única herramienta que hecho de menos en Aperture 3 -respecto a Lightroom, e igual que me sucedía con Capture One- es el filtro degradado, muy útil -aunque no imprescindible- para equilibrar zonas de luz y sombra muy marcadas, como por ejemplo la diferencia entre cielo y suelo en fotografías de paisajes.
Finalmente, dos pegas que le pondría a Aperture son su menor frecuencia de actualización -lo que puede resultar que con cámaras posteriores a la última versión pasen varios meses hasta que Aperture pueda leer sus archivos raw- y que no lea los archivos .xmp (sí los metadatos IPTC estándar, pero no los ajustes ni otros campos personalizados como calificaciones) ni los DNG con ajustes de Lightroom aunque sea parcialmente, lo que supone una barrera para la migración de aquellos usuarios que hasta ahora han utilizado el de Adobe.