Este pequeño vídeo se explica algo sobre cómo la carrera espacial forzó algunos avances en la tecnología fotográfica para lograr enviar aquella mítica primera fotografía de la Tierra desde la Luna. Lo más impresionante -si te paras a pensarlo un momento- es que la cámara debía recibir las órdenes de forma re,m hacer la foto exponiendo la película, revelarla y... escanearla (¡en 1966!) para transmitirla de vuelta a la Tierra.
Aparte de las fotos orbitales de la superficie de la luna, tomadas en franjas mientras la sonda orbitaba nuestro satélite, este fue el resultado cuando la cámara apuntó a la Tierra:
Lo que se vio entonces fue la imagen de la derecha; la de la izquierda es la versión moderna a partir de los originales a los que se aplicó hace relativamente poco filtros y mejoras digitales que no estaban disponibles entonces.
(Vía PetaPixel.)
