Cuando David Bradford decidió dejar su trabajo como director de arte para las sesiones fotográficas de Saks Fifth Avenue y hacerse freelance cogió un trabajo como taxista con la idea de usarlo para ganarse un sueldo base del que poder vivir y dedicar su tiempo libre a su fotografía.
Pero según cuenta desde el primer día como taxista en Nueva York se dio cuenta de que tendría que combinar ambas cosas, ya que esa ciudad está llena de oportunidades fotográficas y que con la luz correcta, cualquier cosa es bonita.
Sus fotos, que incluyen lo que ve desde dentro del taxi, pasajeros que lleva en este, lo que ve en el retrovisor, etc, pueden verse en Drive-By Shootings.
Tiene también varios libros publicados, entre ellos Drive by Shootings : Photographs by a New York Taxi Driver.
(Vía Gadling).