El año pasado el veterano fabricante de cámaras fotográficas Yashica se descolgó en Kickstarter con la Yashica Y35, una cámara digital que utiliza carretes que en realidad no son carretes de película y tampoco almacenan fotos.
La campaña de financiación de Yashica terminó bien y el proyecto salió adelante. Ahora la compañía muestra en este vídeo algunas fotografías tomadas hace uno días con una de estas Y35.
Técnicamente la cámara no es nada del otro jueves: acabado en plástico que imita metal, sensor de cámara de móvil de 14 megapíxeles, objetivo fijo de 28 mm f/2,8, alimentación con dos pilas AA... y carece de pantalla digital.
Lo interesante de la Yashica Y35 está en (o podría estar en, cuestión de opiniones) el uso de carretes que Yashica llama digiFilm y que son algo así como "filtros" de Instagram pero físicos: cada carrete proporciona a las imágenes digitales un aspecto, proporción, estilo y un efecto visual, incluso grano, característico y semejante al que producían antaño diferentes tipos de películas química de verdad.
De este modo es posible aplicar diferentes estilos y efectos sin necesidad de que la cámara tenga botones, si bien tampoco es nada que no pueda hacerse posteriormente con un ordenador o incluso desde el teléfono móvil.