Dmytre Zach creía estar casado con la mujer del presidente Truman
A los pacientes admitidos al Hospital Psiquiátrico Willard se les permitía llevar con ellos una maleta con posesiones personales.
Muchos de ellos nunca abandonaron el hospital, así que a su muerte esas maletas, junto con otras posesiones que podían haber acumulado durante su estancia en el hospital iban siendo almacenadas -y olvidadas- en un ático de este.
El fotógrafo Jon Crispin ha conseguido permiso para fotografiar las más de 400 maletas que fueron descubiertas en ese ático cuando el hospital fue cerrado para reconvertirlo en un centro de tratamiento de drogadictos, lo que se ha convertido en el proyecto willard suitcases.
Esas fotos cuentan parte de la historia de cada uno de aquellos pacientes, aunque muchos detalles sin duda habrán quedado perdidos para siempre en una triste metáfora de lo que es perder la memoria, de lo que es perderse a uno mismo.
(Vía Boing Boing).