SanDisk ha presentado hoy su nueva familia de tarjetas Extreme Pro que duplican la velocidad de 45 MB/s que eran capaces de alcanzar las que hasta ahora eran su modelos más rápidos, las Extreme IV. Las nuevas Extreme Pro -disponibles con 16, 32 y 64 GB de capacidad- tienen una velocidad de lectura y escritura de hasta 90 MB/s.
Desde ahora la familia de tarjetas de memoria SanDisk pasa a estar compuesta por los modelos Extreme en formatos CompactFlash (CF) y Secure Digital (SD) -60 MB/s de velocidad en 8, 16 y 32 GB- y las Extreme Pro en formato CF y con la velocidad y capacidades antes indicadas.
Todo el potencial de las nuevas tarjetas podrá obtenerse en cámaras profesionales y semi profesionales de última generación con bus de datos UDMA -como las EOS 1D, 7D y 5D Mk II, Sony A700, A850 y A900, Olympus E-3, Nikon D300, D3, entre otras- y UDMA 6 para obtener la máxima velocidad. No obstante, las Extreme Pro son compatibles con cualquier cámara que utilice tarjetas CompactFlash.
Con estas tarjetas SanDisk mejora la nueva arquitectura multicanal que acelera el procesamiento de grandes volúmenes de datos. Además, gracias al ya conocido ESP (Enhanced Super-Parallel Processing) el acceso a la memoria flash se realiza por dos vías simultáneas y de forma paralela contra los dos módulos internos de memoria, de forma similar a como funcionan los sistemas RAID para discos duros.
Además del notable incremento de velocidad, con el lanzamiento de esta nueva generación de tarjetas, SanDisk hace mucho hincapié en otros dos factores mejorados: la fiabilidad y la duración.
Por un lado el motor ECC, (Error Code Correction), incorporado en el firmware de la tarjeta, supervisa y mantiene la integridad de los datos que se escriben sin perjuicio de la velocidad, de modo que fiabilidad y velocidad no sean características incompatibles. Por otro, la técnica wear leveling reduce el nivel de desgaste de los componentes de memoria al repartir la grabación de datos entrantes entre todas las celdas disponibles, evitando el acceso repetido y continuo a las mismas celdas y por tanto reduciendo el nivel de deterioro que sufren. Con esta técnica se incrementa su duración a lo largo del tiempo. Actualmente todas las tarjetas de memoria SanDisk tienen una garantía de fábrica de 30 años.
Las tarjetas Extreme Pro están claramente orientadas a fotógrafos profesionales por su rendimiento, pero también por su precio: la tarjeta de 16 GB cuesta 259,90 euros; 459,90 la de 32 GB y 859,90 la de 64 GB.