The Frankenlens: objetivo catadióptrico de 2000 mm en DPReview.
Una opción para acceder a objetivos de focal muy larga -200 mm o más- son los objetivos catadióptricos. Estos objetivos, parecidos a los telescopios reflectores, se ayudan de espejos curvos para dirigir la luz a través de las lentes, lo que los hace compactos, ligeros y muy baratos en proporción a su focal.
Los objetivos convencionales de refracción en cambio sólo utilizan lentes y a focal equivalente resultan mucho más caros y pesados (y su tamaño está físicamente limitado), aunque también dan más calidad de imagen y son más fáciles de usar.
Precisamente hace unos meses los estuve investigando un poco al encontrar por casualidad en eBay un par de ellos; con distancias focales de 500 y 1000 mm (mayor aún si se van a utilizar en cámaras con factor de recorte) costaban apenas un par de cientos de euros.
¡Potencia! Tele extremo de 1540 mm utilizando directamente un telescopio reflector. Foto de Jarle Aasland / NikonWeb.
Sin embargo por lo que pude ver tenían algunas pegas importantes, casi insalvables, excepto para casos de uso muy concretos -como por ejemplo la observación de la Luna y astrofotografía en general- como eran las aberraciones y su poca luminosidad -del orden de f/8 o f/11 como poco y además fija- y en general la escasa calidad de imagen y notable falta de nitidez.
Por todo lo anterior para objetivos con focales interesantes resulta imprescindible el uso del trípode -accesorio al que tengo una especial manía- por lo dejé pasar, aunque es una opción que está ahí y que al no ser excesivamente costosa puede ser interesante aunque sea para uso ocasional o como alternativa a un telescopio.