En Carabiner Keys tienen un montón de inventos curiosos de Scott Amron, incluyendo esta llave-llavero en cierto modo autorreferente que muchos considerarán un gran avance de la categoría «por qué no se me habrá ocurrido a mi antes».
Esta es otro modelo similar; ambas llaves se pueden pedir por encargo y luego llevar a un cerrajero para que haga sobre ellas una copia de alguna llave normal – siempre que ambos modelos sean equivalentes, claro.
Casi todo lo que se muestra en su página parece de relativa baja tecnología: objetos con formas especiales, imanes y demás, demostrando así que a veces no hace falta ser físico nuclear para inventar algo práctico y cotidiano.
(Vía Wired: Gadget Lab.)
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