El catorce es un número compuesto, defectivo, el primer número par que no es una solución para la función φ de Euler y también es un número de Catalan (sin tilde, sí), entre otras cosas.
También es el número de caras de un cuboctaedro, de un cubo truncado y de un octaedro truncado.
Igual que es el número atómico del silicio, tan importante en esta casa.
Y por lo visto también el número máximo de palos que puede llevar en su bolsa un jugador de golf.
Por no hablar de los 14 aciertos de la quiniela, la ilusión máxima de muchos españoles cuando La Quiniela era el juego de azar por excelencia en España.
Pero también son catorce los años que cumple hoy este blog en su forma actual, con Alvy, Nacho y yo como autores, aunque si buceas en los archivos verás que hay contenidos anteriores, de la época de cuando ellos dos tenían sus propios blogs.
Microsiervos en diciembre de 2003
Lo empezamos porque nos pareció que podía ser divertido, aunque nunca imaginamos la cantidad de cosas alucinantes que nos iban a pasar gracias al blog. Cosas tipo ver en directo el último lanzamiento de un transbordador espacial, hacer un vuelo en caída libre, o uno acrobático… y eso por la parte que me toca, que Alvy y Nacho también han tenido sus momentazos.
A estas alturas en Microsiervos hay unas 40.000 anotaciones de casi cualquier cosa que se nos ha pasado por la cabeza en todo este tiempo, por mucho que se suponga que este es un blog de ciencia y tecnología, además de incontables colaboraciones en otros blogs y medios «de toda la vida».
Tenemos más de un millón de seguidores en Twitter, casi 32.000 en Facebook, y vamos camino de los 2.000 en nuestro canal de Telegram…
Y sois todos vosotros los responsables en gran medida de que sigamos dando la lata día a día. No sé si aguantaremos otros catorce años, pero estamos dispuestos a intentarlo.
¡Muchas gracias!