Ganti + Associates planteó este colorido rascacielos de contenedores para un concurso – que ganó: los contenedores están sujetos en una estructura convencional y el conjunto alcanza las diez plantas de altura, aunque dicen que por su modularidad podría llegar más alto, hasta unas 32 plantas y unos 100 metros.
Cada contenedor tiene un tamaño estándar de 40 por 9,6 x 8 pies (técnicamente: FEU) y el conjunto incluye el kit de la señorita Pepis de los edificios modernos: sostenibilidad, aprovechamiento del viento para generar electricidad mediante pequeñas turbinas… La idea es que el edificio en su conjunto sea barato y a la vez sostenible.
Bonus: quien esté interesado en el curioso e intrigante mundillo de los contenedores estandarizados haría bien en leer The Box, de Marc Levinson. Yo lo descubrí gracias a la lista de «los libros del verano» de Bill Gates hace unos años y me sorprendió muy gratamente. Es la historia de cómo una simple caja metálica de tamaño estándar (en la jerga: el TEU, Twenty-foot Equivalent Unit) cambió el mundo del comercio en las últimas décadas, al permitir apilarla y transportarla igualmente en barcos, camiones y trenes. Antes de leer el libro los veía como simples grandes cajas metálicas. Ahora cada vez que miro uno entiendo todo el mundo que hay detrás y lo que han supuesto de avance para la humanidad.
(Vía Gizmag.)