Hace un par de años un grupo de ingenieros de Stanford dio a conocer los microTugs, unos diminutos robots inspirados en los insectos. De hecho, además de su aspecto y tamaño, los microTugs tienen en común con las hormigas, por ejemplo, que son capaces de arrastrar varias veces su propio peso.
En concreto los microTugs demostraron ser capaces de arrastrar 1800 veces su propio peso.
Ahora el mismo equipo de ingenieros ha mostrado una versión evolucionada de sus robots insecto, con la capacidad de sincronizarse para trabajar en equipo. Seis de estos microTugs, con un peso combinado de 100 gramos, son capaces de arrastrar1 un coche de 1800 kg, como se puede ver en el vídeo.
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1. Arrastrar, que no levantar; el vídeo está pasado a veinte veces (x20) la velocidad real.