Todos hemos tenido que sufrir los trailers y diversos avisos que no hay manera de saltarse en los DVD que compramos porque los estudios deciden lo que podemos y no podemos hacer con nuestros discos:
Así que como dice este gráfico, que compara el funcionamiento de un disco ripeado para saltarse toda esa basura con el del disco tal y como se compra, «Y luego se preguntan por qué la gente no compra sus película, vota con tu cartera».
Y que conste que uso la palabra pirateado para abreviar, no porque comparta la definición de pirata que las entidades de gestión de autor y similares usan.
(Making Light vía Boing Boing).