Películas de Bajo Presupuesto. (John Randall, 1991. DORSL Ediciones). Lo del «bajo» presupuesto es un poco relativo, pues el principal ejemplo que guía el libro empieza a partir de 300.000 dólares (de 1991) para un largometraje de 90 minutos.
Obviamente, se pueden hacer y se hacen películas o cortometrajes por menos dinero: dicen que La Fiesta se hizo con 6.000 euros, aunque después de leer el libro, se me hace difícil creerlo. El libro al menos enumera todo lo necesario, lo prescindible, lo imprescindible y las diversas partidas de gastos a tener en cuenta durante toda la producción.
Como simple guía de «cómo se hace una película» (que es por lo que me intereresó el libro) es muy recomendable. Desgrana el proceso hasta el más ínfimo detalle. Supongo que cualquiera que explicara todo sobre su profesión asustaría a cualquier lector (por ejemplo: cómo se hace un buen web, cómo operar a un paciente de cataratas).
Y es lo que sucede con el libro: explicaciones sobre financiación, contratos, papeleos, permisos, equipamiento, alquileres, seguros, escritura del guión, matices de dirección, iluminación, cámara, actores, agentes, montaje, banda sonora y efectos, copias, distribución, publicidad, festivales… y todo explicado para que cualquier mortal lo entienda.
Lo bueno de que el libro sea tan breve (200 páginas) es que Randall no se corta un pelo al dar sus opiniones más directas fruto de la experiencia y resume lo que opina en frases claras que pueden ahorrar dudas:
- Rueda siempre en 35 mm.
- Si te lo puedes permitir, usa una cámara-grua
- Evita la música enlatada
- La banda de efectos sonoros es el secreto del éxito de muchas películas de bajo presupuesto
- Contrata únicamente profesionales
En lo negativo, dos puntos: primero, que la técnica de «hacer películas» está situada a finales de los 80, cuando el vídeo apenas existía, el montaje digital tampoco y todo era mucho más «manual»; tal vez en el 2003 todo es un poco más digital y distinto); y segundo, que está demasiado orientado al mercado americano (normativas, contratos, empresas, etc.) explicando detalles que posiblemente en Europa sean muy distintos. Pero como guía rápida para aprender algo del cine por dentro es un libro estupendo, además de bien escrito.