Por Nacho Palou — 1 de octubre de 2008
La portada de la revista Esquire de este mes de octubre tiene una pequeña zona de papel electrónico, un tipo de pantalla de cristal líquido pero mucho más fina y flexible.
Es ingenioso cómo combina elementos estáticos de color para disimular que la pantalla es en blanco y negro –y cómo algo que hace no mucho parecía «del futuro» hoy es «de usar y tirar».
Eso si, el día que su uso sea habitual y la tinta líquida ocupe toda la superficie de la portada los quioscos van a parecer árboles de navidad –y habrán de ser evitados por los epilépticos.
(¡Gracias Gali por enviarlo!)