En esta mini-presentación de la conferencia TED Steve Jurvetson cuenta una de sus aficiones: construir y lanzar cohetes, junto con un grupo de amigos, en un remoto desierto de los Estados Unidos.
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Esos no tan pequeños «pequeños» juguetes se transforman en todo un espectáculo visual durante el lanzamiento:
Jurveston pertenece a los Rocket Mavericks, una asociación de aficionados a los «cohetes caseros», auténticos científicos locos capaces de construir cacharros de todos los tamaños que suelen elevarse cientos de metros en el aire.
En la Galería de los Rocket Mavericks en Flickr hay fotos auténticamente geniales de estos asombrosos chismes, como esta toma de un lanzamiento nocturno:
Así como muchas imágenes de detalle que muestran más de cerca cómo son algunos de estos «pedazo pepinos» que lanzan:
El universo de estos «locos por los cohetes» incluye ordenadores, simuladores de vuelo, cámaras de fotos, vídeo, motores convencionales, motores experimentales, explosiones, trayectorias fuera de control, sensores de rayos-X y duro trabajo. A veces, como cuenta Jurveston en la conferencia, merece la pena, porque se pueden conseguir resultandos tan espectaculares como esta fotografía:
que fue tomada por uno de estos cohetes «caseros» que alcanzó los 30.000 metros de altura, llegando al límite de la atmósfera terrestre y saliendo a lo que se considera habitualmente «el espacio».
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