En este vídeo se pueden ver algunas de las capacidades del iCub, un robot humanoide desarrollado en Italia, que con su cara de niño «del valle» resulta entre medio feo e inquietante.
En fin, a lo que interesa: el iCub es capaz de controlar su cuerpo de diversas formas para mantenerse en equilibro incluso sobre una sola pierna. Con ese «sentido del equilibro» que proviene de los sensores, motores y de la medición de las perturbaciones externas, el chisme es capaz de mantenerse imperturbable incluso aunque los ingenieros se acerquen a empujarlo, darle golpes o tirar de sus brazos.
Nota: ningún robot fue maltratado para rodar este vídeo.