Por @Wicho — 29 de noviembre de 2016

Tras casi 10 años de construcción el nuevo cofre de acero de la central nuclear de Chernóbil está por fin en su sitio para mantener a raya, dentro de la medida, la radiación que aún se acumula entre sus restos mientras estos son retirados; el interior del arco incluye equipos para poder desmontar lo que queda de la central.

Con un peso de 25.000 toneladas, 108 metros de altura por 150 de ancho y casi 260 de largo es la estructura más grande que nunca se haya movido en tierra, ya que fue construido a algo más de 300 metros de distancia de la central para proteger a los operarios.

Eso sí, ha costado más 2.000 millones de euros frente a los 500 de los que se hablaba en 2007.

En Chernobyl confinement: the story se puede ver la historia de la construcción de este cofre de acero que el fabricante asegura que podrá mantener la estanqueidad durante al menos 100 años.

Compartir en Flipboard Publicar / Tuitear Publicar