A Apple le concedieron hace unos días la patente de diseño D613,300 por Cover Flow, la interfaz gráfica que se usa para «hojear» imágenes tales como las portadas de los álbumes y canciones en iTunes, los ficheros de imágenes en el Finder y similares.
Me pareció curioso ver que la fecha de la petición de la patente sea junio de 2007, porque por aquí y en otros blogs hablamos de CoverFlow un año antes, en 2006, cuando era una sencilla y espectacular aplicación independiente para Mac OS X. Como se supo poco después de su boom en popularidad, Apple adquirió la empresa que había creado Cover Flow ese mismo año (2006), incluyendo la tecnología y derechos de patentes correspondientes. CoverFlow fue una idea del artista Andrew Coulter Enright que plasmó en forma de código el programador Jonathan del Strother.
Es interesante que, aunque fuera notoriamente público, CoverFlow pasara casi un año entero en manos de Apple pero «sin patente»; al menos, eso parece que sucedió según la documentación. Apple presentó su primera petición de patente antes de mostrar CoverFlow al público en iTunes 7, a mediados de 2007. Al día siguiente de hacerse público, CoverFlow (la empresa y el software independiente) cambiaron su web a la que todavía hoy existe para dar la noticia de la adquisición. Posteriormente Cover Flow sería un exitazo en cuanto a experiencia de usuario, que pasaría a usarse en los iPod, el Finder de Mac OS X, el iPhone e incluso en el navegador Safari. Siendo Cover Flow tan notoriamente público, tampoco parece que pudieran haber permitido a otra compañía patentar un clon sin ponerle pegas, por ser el original claramente anterior. [Actualización: Efectivamente David nos confirma en un correo que es porque en EE.UU. está permitido presentar una patente hasta un año después de haber hecho público el «invento» si se cuenta con pruebas/testigos suficientes.]
Actualmente una reproducción del mismo efecto gráfico se utiliza en diversas interfaces en otros programas y gadgets por parte de diversas empresas y creadores independientes. Está por ver si Apple utiliza su nueva patente sólo defensivamente –que sería lo deseable– o de forma ofensiva contra quienes han copiado el popular efecto, o si les permite seguir usándolo a cambio de una licencia. Como bien apunta Engadget la patente en cuestión además tiene la particularidad de ser una patente de diseño, algo diferente de las «patentes de utilidad» según la legislación norteamericana.
Se puede acceder al PDF de la patente aquí: