Pequeños componentes electrónicos. Tornillos. Motas. Cerillas. Tuercas. Piezas de plástico. Gotas de agua.
Y El Danubio azul de Strauss sonando de fondo.
Son objetos que levitan en el espacio abierto que hay entre varios emisores de ultrasonidos que pueden «enfocarse» en un punto muy preciso, haciendo que las ondas los mantengan suspendidos en el aire contrarrestando la gravedad. Y a partir de ahí, si esas sondas se van «afinando» muy, muy suavemente, se pueden manipular, haciéndolas girar o incluso desplazarse poco a poco.
Vale, no es el rayo tractor de Star Trek, pero se va avanzando.
(Vía Geeks are Sexy + .)