Trevor Blackwell decidió hace años que «Los patinetes que se mantienen en equilibrio, como el Segway, parecen milagros tecnológicos, pero de hecho no es demasiado complicado construirse uno.» Así que se puso manos a la obra y a finales de 2002, poco después de que el Segway se popularizara ya se había fabricado uno. El artículo, Building a Balancing Scooter, que nos sugirió minid, es una delicia. Va narrando cómo fue su construcción detalle a detalle, con algunas fotos: cómo las piezas son relativamente fáciles de encontrar y muchas provienen de otros cacharros reciclados. E software son apenas 500 líneas de código. En 2005 Blackwell construyó una versión 2 de su patinete, básicamente más ligero y rápido. Su motivación fue ganarle una carrera al vecino, que se había comprado un par de Segways.