Esta demostración de un sensor 3-D resulta bastante espectacular; se le adivinan con muy buenas posibilidades. Y si se parece al Kinect es porque la empresa que está detrás es la misma que le licenció Kinect a Microsoft: PrimeSense.
Robert Scoble que estuvo viéndolo en el CES y entrevistó a los responsables de la empresa lo considera revolucionario: cuesta menos de 100 dólares, es más preciso y mucho más pequeño que de los Kinect – y puede servir de teclado como se ve en el vídeo .
Algo me dice que si las tabletas y los teléfonos móviles han de innovar de algún modo en este año y el siguiente será incorporando algún tipo de control de este estilo que amplíe sus posibilidades más allá de la mera superficie de contacto. Y si PrimeSense ya ha demostrado ser una empresa puntera en este campo… le espera sin duda un buen futuro.