Por Nacho Palou — 7 de Noviembre de 2014
Aunque los perros son capaces de obedecer a gestos y palabras de sus amos o entrenadores, no es tan evidente la comunicación en el sentido contrario, de los perros hacia las personas.
Eso es lo que tratan de resolver en la facultad de informática de la Universidad de Carolina del Norte, donde han desarrollado una suerte de mochila provista con sensores de movimiento que interpretan los gestos que hace Fido, el perro de nombre poco original utilizado en las pruebas
La clave para hablar con Fido se basa en un pequeño ordenador con sensores que interpretan la postura del perro como una manera de traducir el lenguaje corporal canino para que los humanos los entiendan. También permite que las personas comuniquen órdenes al animal utilizando vibradores dispuestos en el arnés. Este sistema puede resultar útil en perros guía o en los perros utilizados en labores de búsqueda y rescate.
Ya hay una petición en marcha para que este desarrollo se adapte también a la comunicación entre parejas.