Por @Alvy — 6 de Diciembre de 2007
En la Union Soviética rigió durante algunos años el llamado Calendario revolucionario soviético, pretendidamente más racional que el convencional. De ese modo en 1929 todas las semanas comenzaron a tener cinco días, y los días de descanso rotaban entre la población según un código de colores. En 1931 se cambió el sistema a una semana de seis días, con un séptimo de descanso común. En 1940 volvieron a la semana de siete días que usaba el resto del mundo, para alivio de todos los ciudadanos. [Fuente: Wikipedia]